miércoles, 14 de octubre de 2015

Eliminatorias Rusia 2018: Este rival ya es un cuco (Perú 3 - 4 Chile)


Preámbulo: Del equipo

Hace algún tiempo algún periodista dijo que Perú no debería tener como objetivo "ir al mundial", sino mejorar como equipo. La idea puede tener sentido, sería como tener el doble del tiempo para llegar a la meta, pero las eliminatorias son un torneo muy largo y disperso, por lo que tienen que saber jugarse dentro de sus caraterísticas. Los equipos no son los mismos porque cambian mucho sus jugadores(son 18 partidos en un lapso de 3 años), hay paradas de 5 a 6 meses sin jugar, hay que reunir jugadores de diferentes latitudes y con diferentes carreras y estilos, etc...

Así, tal vez la idea correcta sea no dejarte nublar por el objetivo, pero tenerlo siempre presente. Tal vez Argentina y Brasil puedan decir algo así, porque hasta con malos equipos pueden terminar clasificando a punta de esfuerzos individuales. Pero el resto tiene que sufrir, tiene que intentar consolidar planteles y jugadores, duplas, automatismos, y cosas que duren en el tiempo y que puedan soportar varios meses sin entrenamiento.

Yo no sé si Gareca apunta a hacer algo así, quiere luchar cada partido estratégicamente, o quiere hacer los 2. Markarían hacía lo 2do, con relativo éxito en algunas partes. Pero es muy difícil consolidar un equipo cuando varias tu forma de jugar con cada presentación, Cierto es que puede traerte resultados, pero el beneficio a la larga es menor. El Mago sí logró consolidar jugadores con su método (Yotún y Advíncula, por nombrar un par) y creo que le contagió a muchos la idea de marcar con fuerza, pero no avanzó más. No puedo leer todavía a Gareca, pero ojalá tenga algo claro en mente.

2. Nuestro cuco

Habiendo dicho todo eso llegamos al 2do partido de las eliminatorias, que fue una montaña rusa de emociones de principio a fin. Lo empatamos, le dimos vuelta, nos lo voltearon, nos expulsaron... una noche negra, pero un tremendo espectáculo de fútbol. Ningún equipo jugó bien, pero ojalá todos los partidos fueran así. Siento que Perú dio todo lo posible, aunque le faltó serenidad para manejar el marcador, y Chile aprovechó al máximo los momentos de brillantez que tuvo, con un estadio que reventaba. Jamás había ido a un Clásico del Pacífico en el Nacional, y vaya que fue una experiencia única. En algun momento del partido me separé del grupo y terminé en la parte alta del estadio (bajar era difícil), saltando y gritando abrazados  por cada gol con mis vecinos de espacio. No terminó bien para nosotros, pero el ánimo nunca bajó, y eso es lo que importa, alentar hasta el final.

Pero bueno, el camino a Rusia es largo y aunque no nos sobra nada, todavía falta muchísimo por recorrer. Digamos que perder (incluso de local) contra Chile está hasta dentro de los planes, aunque eso signifique estar obligado a recuperar puntos de visita.