El Lyon nunca supo qué hacer. Da algo de pena, después de todo es la primera vez que llegaban tan lejos y se quedaron a un pasito de la final. Se encontraron con un grande, pues. Un grandote. El Bayern demostró porqué ha llegado tna lejos ante un equipo que nunca supo cómo entrarle. Presionando adelante, pero sin apresurarse. Protegiendo su arco moviendo el balón, pero en el campo del rival. Atacando con criterio, sin las locuras de un equipo acostumbrado a jugar rápido y a atontar a su rival. Sereno en defensa, atento al anticipo. Un partido vibrante en un inicio, hasta que Olic, intratable durante casi todo el partido, mandó callar a todo el State Gerland con un gol inteligente.
No es que Lyon haya jugado bien pues, ninguno de los 2 partidos. El equipo alemán sabía que tenía que aguantar la arremetida inicial y tratar de marcar rápido, para obligar a los franceses a meter 3 goles. Y así pasó. Lectura perfecta la de Van Gaal, que a veces me hace pensar cuántas maneras puede tener para plantear un partido. Un Lyon que venía de eliminar a un buen equipo como Bordeaux (y que le ganó bien a los bávaros en la etapa de grupos), y al Real Madrid. Pero bueno, éste último no es exactamente un gran equipo.
Ahora se viene una final que definitivamente no será fácil, sea quien sea el rival. Pero el Bayern tiene con qué y, sobre todo, tiene jugadores con ansias de ganar la copa más importante de Europa. Vamos Bayern!
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